sábado, 5 de mayo de 2012

Los autores del sabotaje a Airline Brokers: A la vista en Miami

por  Nicanor León Cotayo, publicado el Domingo, 29 de Abril de 2012 06:40
Uno de los más connotados de esos terroristas, Luis Posada Carriles, reside tranquilamente allí, tal y como sucedió con Orlando Bosch Avila, del cual, precisamente el viernes, hizo un año de su muerte.
 Uno de los más connotados de esos terroristas, Luis Posada Carriles, reside tranquilamente allí, tal y como sucedió con Orlando Bosch Avila, del cual, precisamente el viernes, hizo un año de su muerte.

Como una prolongación de los actos terroristas ejecutados contra Cuba durante años en Miami, el viernes incendiaron las oficinas de Airline Brokers, especializada en viajes hacia la isla.

Esos atentados han sido perpetrados generalmente por grupos ultraderechistas de origen cubano que ni siquiera han sido investigados a fondo y mucho menos detenidos.

Uno de los más connotados de esos terroristas, Luis Posada Carriles, reside tranquilamente allí, tal y como sucedió con Orlando Bosch Avila, del cual, precisamente el viernes, hizo un año de su muerte.

Otros con mayor o menor jerarquía en ese mundo del hampa también han actuado por allá a sus anchas, incluidos crímenes, chantajes y negocios sucios a granel.

Así han desfilado los nombres, entre muchos otros, de Rodolfo Frómeta, jefe de la pandilla Comandos F-4, Eduardo Arocena, jefe de la banda Omega 7, y un peje de menor peso, Valentino Hernández, asesino de un socio de correrías, Luciano Nieves.
Aunque integran una abultada constelación de gente como ellos y la narración de sus fechorías podrían abarcar libros de horror, sin embargo existe una que sintetiza a la mayoría.

El asesinato del joven cubano de 26 años de edad, Carlos Muñiz Varela, el 28 de abril de 1979 en una calle de San Juan, Puerto Rico, a quien con un disparo de pistola 45 le destrozaron el cráneo.

Familiares suyos lo sacaron de La Habana en febrero de 1962 y lo radicaron en Puerto Rico, aunque luego por sus ideas y comportamiento llegó a ser presidente de la Agencia Turística Viajes Varadero e integrante del Comité Nacional de la Brigada Antonio Maceo.

En diciembre de 1978 el Comité Ejecutivo de la Operación Reunificación Familiar visitó La Habana, y entre sus integrantes más activos y entusiastas resaltó Muñiz Varela.
Tan solo en unos meses él propició la visita a su lugar de origen de unos 3 500 cubanos residentes en Puerto Rico, hecho valorado por algunos como un peligroso desafío a quienes se oponían a esos viajes.

Horas después de su muerte portavoces de unas 15 organizaciones de la comunidad cubana en el exterior demandaron en conferencia de prensa celebrada en San Juan que el FBI tomara medidas contra los asesinos. No sucedió.

En esa ocasión también denunciaron que cuatro meses antes del asesinato –enero de 1979- la banda ultraderechista Omega 7 se atribuyó la explosión de una bomba en las Oficinas de la Agencia de Viajes Varadero, en la capital puertorriqueña.

Según opinó The Miami Herald el tres de mayo de aquel año, la muerte de Muñiz Varela “podría ser el inicio de una nueva ola terrorista en el sur de la Florida si las autoridades federales norteamericanas no intervienen rápidamente”.

No intervinieron. En 1976 con la explosión de una bomba le cortaron las piernas al locutor radial Emilio Milian, porque no se plegó totalmente a las exigencias de sus agresores.
Después se recrudecieron los hechos violentos contra relevantes artistas cubanos invitados a actuar en Miami, así como destrozaron públicamente copias de discos de cantantes latinoamericanos que se presentaron en La Habana.

Ahora, el viernes, provocaron un incendio en las oficinas de Airline Brokers en una céntrica zona del condado Miami-Dade, y dejaron en ruinas a prácticamente toda la instalación.

Vivian Mannerud, propietaria de la agencia, declaró que su oficina personal fue devorada por las llamas. La policía, dijo la prensa local, trata de esclarecer las posibles causas del desastre, “sin descartar una eventual acción terrorista”.

Airline Brokers fue una de las agencias charters que tomó parte en la organización de vuelos hacia Cuba con el objetivo de trasladar creyentes radicados en Miami durante la reciente visita del papa Benedicto XVI.

Contra ese viaje desataron una fuerte y sostenida campaña voceros de la extrema derecha de origen cubano, pero sobre todo los congresistas Ileana Ros-Lehtinen y Marco Rubio.

En cuanto a la posibilidad de localizar a quienes sabotearon las oficinas de Airline Brokers, baste recordar que Washington cuenta con el más poderoso aparato de espionaje del mundo.

Si tiene una real voluntad y un real interés, podrá encontrar a sus autores hasta debajo de las piedras, a no ser que determinados intereses electorales y de otro tipo no lo permitan. ¿Qué decidirán?

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Como el fbi va a encontrar a los terroristas que incendiaron esa oficina,si ellos son iguales de terroristas y utilizan para los trabajos sucios a esa ralea humana,desprovista de todo vestigio de civilizacion y de hermandad,por ahi anda paseando el viejo de la boca virada,el padre de todos los terroristtas y el orlando...por que lo permiten...pues ellos ayudan a la cia y al fbi...y ademas son traidores pagados por una potencia extrangjera,si los eeuu en contra de todas las leyes tienen una mal llamada radio y tv marti para llamar a la subversion al pueblo cubano...que haria eeuu si cuba operara una estacin que incitara al pueblo norteamericano a derrocar su gobierno???a ver señores estupidos tienen la palabra...

Anónimo dijo...

COMO MISMO ELLOS HAN COMETIDO CRIMENES CONTRA CUBA,DEBEMOS DE AJUSTICIARLOS,EN DEFINITIVA SON TERRORISTAS Y LE VAMOS HACER UN BIEN A LA HUMANIDAD,MUERTE A POSADA CARRILES Y A ORLANDO.