Este artículo del escritor estadounidense David Ray Griffin, profesor emérito de filosofía de la religión y la teología, publicado en Global Research en 2009, afirma que Bin Laden murió de insuficiencia renal hace más de 10 años y que todos sus mensajes en video y audio de la última década fueron patrañas tan falsas como la liberación de la soldado Jessica Lynch en Irak 2003, elaboradas por los mismos guionistas del Pentágono y la Casa Blanca.
Sus últimos registros documentados indican que recibió tratamiento medico en el hospital norteamericano de Dubai en julio de 2001, donde adquirió dos máquinas para diálisis. Para Griffin, este ex servidor saudita de Estados Unidos contra los soviéticos en Afganistán convertido en “enemigo”, y cuya familia tiene negocios con GW Bush en Estados Unidos, no tuvo que ver con la licuación del acero estructural de las Torres Gemelas el 11/9/2001, episodio controvertido, lleno de sombras y próximo a cumplir 10 años.
Desde la transferencia del poder de la administración Bush a la administración de Barack Obama, la cuestión de si Bin Laden está muerto o vivo ha llegado a ser más importante.
Pese a que George W. Bush dijera su famosa frase “quiero a Osama Bin Laden ‘vivo o muerto’”, claramente no hizo nada serio para lograrlo. Además de indicar que no fue informado sobre Bin Laden, lo demostró enviando a Iraq la mayor parte de los recursos militares de Estados Unidos. Por supuesto, Bush podría mantenerse despreocupado sobre Bin Laden porque sabía que, además de no tener nada que ver con el 11/9, de todos modos estaba probablemente muerto.
No sé qué piensan sobre estas materias el presidente Obama y su gente, pero su retórica presupone que Bin Laden era responsable de 9/11 y todavía está vivo. En noviembre de 2008, por ejemplo, una historia del Washington Post dijo: “Presidente electo Barack Obama… se propone renovar el compromiso de Estados Unidos en la cacería de Osama Bin Laden”. … ‘Ése es nuestro enemigo’, dijo un consejero sobre Bin Laden, ´y él debe ser nuestro blanco principal’”.
En su domicilio de la Casa Blanca, el 27 de marzo de este año (2009), el presidente Obama dijo: “Al Qaeda y sus aliados -los terroristas que planearon y apoyaron los ataques del 11/ 9- están en Pakistán y Afganistán. Múltiples estimaciones de inteligencia han advertido que Al-Qaeda está planeando activamente ataques contra la patria de Estados Unidos desde su seguro asilo en Pakistán. … Al-Qaeda y sus aliados extremistas se han movido a través de la frontera a áreas remotas de territorio paquistaní. Esto incluye casi ciertamente la jefatura de Al-Qaeda: Osama Bin Laden y Ayman al-Zawahiri.”
Obama ha apelado regularmente a estas estimaciones de inteligencia, que invariablemente han demandado que Bin Laden está oculto en Pakistán, en alguna parte a lo largo de la frontera con Pakistán. Esta afirmación se utilizó para justificar la extensión de la actividad militar de Estados Unidos en Pakistán, con el resultado que la gente ahora habla de la “guerra de AfPak”.
Las evidencias objetivas incluyen los siguientes hechos:
Quinto, desde 2001 Estados Unidos ofrece una recompensa de 25 millones de dólares por cualquier información que conduzca a capturar o a matar a Bin Laden. Pero esta oferta de recompensa no ha producido como resultado ninguna información, aunque Pakistán tiene mucha gente desesperadamente pobre, y sólo la mitad muestra su apoyo a Bin Laden.
Sus últimos registros documentados indican que recibió tratamiento medico en el hospital norteamericano de Dubai en julio de 2001, donde adquirió dos máquinas para diálisis. Para Griffin, este ex servidor saudita de Estados Unidos contra los soviéticos en Afganistán convertido en “enemigo”, y cuya familia tiene negocios con GW Bush en Estados Unidos, no tuvo que ver con la licuación del acero estructural de las Torres Gemelas el 11/9/2001, episodio controvertido, lleno de sombras y próximo a cumplir 10 años.
Desde la transferencia del poder de la administración Bush a la administración de Barack Obama, la cuestión de si Bin Laden está muerto o vivo ha llegado a ser más importante.
Pese a que George W. Bush dijera su famosa frase “quiero a Osama Bin Laden ‘vivo o muerto’”, claramente no hizo nada serio para lograrlo. Además de indicar que no fue informado sobre Bin Laden, lo demostró enviando a Iraq la mayor parte de los recursos militares de Estados Unidos. Por supuesto, Bush podría mantenerse despreocupado sobre Bin Laden porque sabía que, además de no tener nada que ver con el 11/9, de todos modos estaba probablemente muerto.
No sé qué piensan sobre estas materias el presidente Obama y su gente, pero su retórica presupone que Bin Laden era responsable de 9/11 y todavía está vivo. En noviembre de 2008, por ejemplo, una historia del Washington Post dijo: “Presidente electo Barack Obama… se propone renovar el compromiso de Estados Unidos en la cacería de Osama Bin Laden”. … ‘Ése es nuestro enemigo’, dijo un consejero sobre Bin Laden, ´y él debe ser nuestro blanco principal’”.
En su domicilio de la Casa Blanca, el 27 de marzo de este año (2009), el presidente Obama dijo: “Al Qaeda y sus aliados -los terroristas que planearon y apoyaron los ataques del 11/ 9- están en Pakistán y Afganistán. Múltiples estimaciones de inteligencia han advertido que Al-Qaeda está planeando activamente ataques contra la patria de Estados Unidos desde su seguro asilo en Pakistán. … Al-Qaeda y sus aliados extremistas se han movido a través de la frontera a áreas remotas de territorio paquistaní. Esto incluye casi ciertamente la jefatura de Al-Qaeda: Osama Bin Laden y Ayman al-Zawahiri.”
Obama ha apelado regularmente a estas estimaciones de inteligencia, que invariablemente han demandado que Bin Laden está oculto en Pakistán, en alguna parte a lo largo de la frontera con Pakistán. Esta afirmación se utilizó para justificar la extensión de la actividad militar de Estados Unidos en Pakistán, con el resultado que la gente ahora habla de la “guerra de AfPak”.
Las evidencias objetivas incluyen los siguientes hechos:
Primero, hasta el mediodía del 13 de diciembre de 2001, la CIA estuvo interceptando regularmente mensajes entre Bin Laden y su gente. En aquel momento, sin embargo, los mensajes pararon repentinamente y la CIA nunca volvió a interceptar otra vez algún mensaje.
En segundo lugar, el 26 de diciembre de 2001, un importante periódico pakistaní publicó una información con la historia de que Bin Laden había muerto a mediados de diciembre, añadiendo:
“Un miembro prominente del movimiento afgano del Talibán… indicó… que él mismo había asistido al entierro de Bin Laden y vio su rostro antes de la sepultación”. Tercero, Bin Laden tenía una enfermedad al riñón. Lo habían tratado para atendérsela en el hospital norteamericano de Dubai en julio de 2001, oportunidad en que adquirió, según se informa, dos máquinas de diálisis para llevárselas. Si usted se ha preguntado alguna vez qué hacía Bin Laden durante la noche anterior a los ataques del 11/9, las noticias de CBS divulgaron que recibía tratamiento de diálisis del riñón en un hospital de Pakistán. Y en enero de 2001, el Dr. Sanjay Gupta dijo que -observando un vídeo de Bin Laden hecho a finales de noviembre o principios de diciembre de 2001- éste parecía estar en las últimas etapas de una insuficiencia renal.
Cuarto, en julio de 2002, CNN divulgó que habían capturado a los escoltas de Bin Laden en febrero de ese año, añadiendo: Las “fuentes creen que si capturaron a los escoltas lejos de Bin Laden, es probable que el hombre más buscado en el mundo esté muerto.” Quinto, desde 2001 Estados Unidos ofrece una recompensa de 25 millones de dólares por cualquier información que conduzca a capturar o a matar a Bin Laden. Pero esta oferta de recompensa no ha producido como resultado ninguna información, aunque Pakistán tiene mucha gente desesperadamente pobre, y sólo la mitad muestra su apoyo a Bin Laden.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario