Hace unos cuantos dias, cuando me despedia de un colega, le dije que tenia que leer las noticias, que saber que pasaba en el mundo, para actualizar mi blog, y con una expresion de incomprension y asombro me pregunto el por que de la prisa, que por que “tenia” que hacerlo, que con eso que yo ganaba.
Me llene de pena y desconcierto al darme cuenta, la ignorancia en que algunos prefieren sumergirse, como escojen vivir a ciegas y solo pensar en su micromundo o en la linea de invierno que ya llega.
Esta colega no se entera, o si lo ha sabido no le interesa, de lo que son las “misiones humanitarias”, nunca ha pensado que en Nigeria una niña de la edad de su hijita vive en arapos, ya tiene hijos y no tiene esperanza.
No se ha enterado o prefiere no recordar que en Etiopia, los ninos que sobreviven la desnutricion y el desconsuelo,y que tal vez nunca dormiran en una cama, solo viven la mitad del tiempo que pudieran vivir si hubieran nacido en otra parte del mundo.
Ella nunca se ha imaginado que es pasar la noche apretando a tus hijos a tu pecho, tratando de escuchar en el silencio, la direccion del ultimo misil que ya se acerca y esperar pacientemente el dia, por que simplemente siempre llega, y habra que curar a los heridos, enterrar a los muertos, contar cuantos quedaran para la cena, ensenarle a los ninos las tareas, la escuela ha cerrado, estan en Guerra.
No creo que ella alguna vez pensara, que es una suerte haber estado lejos el 9-11 de las torres gemelas , o no haber estado en aquel tren de Madrid el 11 de marzo (2004) o que es solo casualidad y azar, no vivir en el pais en el que los dueños del mundo prefieren tirar bombas, y un joven americano prueba punteria con una diana humana porque si es diferente, no interesa.
A ella no le pasa por su mente la modificacion de los fenomenos naturales , porque quizas nunca se ha puesto en el lugar de algun haitiano y en su micromundo todo esta arreglado. No quiere saber quien es el culpable y “por que preocuparse si todo lo dice la prensa” y “manana saldra el sol, el tiempo refresca”. Ella no lo sabe y no quiere saber.
Tal vez tenga razon y pensar mucho solo nos va a dar un gran dolor de cabeza, pero esta terquedad que yo padezco, ya yo les he contado como es que me llega , la sonrrisa de mis hijos, la fragilidad de una abuela, y la franqueza, me obligan a volver aqui, a buscar la verdad y querer que todos la sepan, aunque tal vez nadie me lea y como ella me asegura, esto a muy pocos le interesa.
2 comentarios:
Hay gente que tiene el mismo sentir, la misma desazón, las mismas preguntas. Porque nuestro destino depende tanto del azar, y del lugar en que nacimos es una de las grandes preguntas como lo planteás y el desafío es que mas allá de ese azar primordial, las personas tengamos las mismas oportunidades.
A pesar de que pareciera que es mejor vivir con los ojos cerrados, sin saber, elijo como decís vos, vivir de ojos abiertos. Me gustó mucho esta entrada.
Yo te leo!
Te leo todos los días.
Sigue adelante. Tu terquedad es útil. Es necesaria.
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