MUAMMAR GADDAFI: HÉROE DE LOS DERECHOS HUMANOS

Gaddafi, asesinado por los "defensores" de los Derechos Humanos.
Amnistía Internacional, una organización que se ha demostrado es responsable por las muertes de muchos seres humanos mediante su apoyo a la guerra de Estados Unidos y Europa contra Libia, y por permanecer en silencio mientras tanto, se encuentra ahora en la búsqueda de un “Héroe de los Derechos Humanos” (http://www.amnestyusa.org/heroes).
Si se presenta a sí misma como “defensora de los derechos humanos”, Amnistía Internacional prefiere ignorar las grandes violaciones a los derechos humanos que se cometieron y se siguen cometiendo en Libia, pues no menciona ni una sola vez a este país en su revista “Defensor de los Derechos Humanos” —publicada en Australia, una de las principales fuentes de su financiamiento— en las ediciones de junio, julio y agosto, durante una etapa crítica de la guerra.

Aunque Amnistía Internacional admite que “fue advertida” de que muchos de los supuestos mercenarios detenidos, torturados y asesinados por los rebeldes libios que respaldó la OTAN no eran sino trabajadores inmigrantes de África Subsahariana, la organización de derechos humanos no tomó ninguna medida para ayudarlos, como tampoco a los libios negros que tenían plenos derechos bajo la Jamahiriya, y que fueron torturados y masacrados por la OTAN y los rebeldes en nombre de la democracia y de la intervención humanitaria (ver “The humanitarian war in Libya: there is no evidence”, http://mathaba.net/news/?x=629013).

Sin evidencia alguna que justifique los bombardeos “humanitarios” y la destrucción de Libia, hay, en cambio, pruebas fehacientes de que Muammar Gaddafi es el mayor Héroe de los Derechos Humanos de nuestro tiempo (por ejemplo, ver “The big picture: war on Libya is war on entire Africa”, http://www.mathaba.net/news/?x=627695; “How Gaddafi improved the situation of the Libyan women”, http://www.mathaba.net/news/?x=629271; y “16 things Libya will never see under NATO-rebel regime”, http://www.mathaba.net/news/?x=629174) y, por lo mismo, la mayor amenaza que enfrenta Occidente con sus “organizaciones de derechos humanos”, como ha señalado el Honorable Ministro Louis Farrakhan (http://www.finalcall.com/artman/publish/Minister_Louis_Farrakhan_9/article_8086.shtml) (nota del traductor: el texto de Farrakhan fue escrito en agosto, cuando Gaddafi aun vivía, lo que explica la conjugación de los verbos):

“Gaddafi empleó miles de millones de dólares en conectar a los estados africanos. Este hombre tiene algo que hace a las potencias occidentales —que han crecido a fuerza de chupar la sangre africana— temer que África se vuelva independiente y utilice los inmensos recursos a su disposición, que el mundo occidental necesita, para convertirse en un continente poderoso y expandir su poder en el siglo XXI”.

“Así que se convirtió en una amenaza. Con el fin de vampirizarlo y destruirlo, y destruir lo que él está haciendo con África y para África, ellos redactan este drama mentiroso sobre un Gaddafi que mata a su propio pueblo, cuando lo que quieren es quitarlo del poder, asesinarlo, destruir lo bueno que este hombre ha hecho y colocar un gobierno títere al frente de Libia, de modo que ellos no tengan que lidiar más con la idea de los Estados Unidos de África, hacia la cual se estaba orientando la Unión Africana a través de la dirección del Hermano Gaddafi, con su ayuda y su asistencia monetaria”. “Otra cosa que conducía a que le dieran este premio humanitario a Muammar Gaddafi y a la Jamahiriya es el informe de la ONU emitido alrededor de enero de 2011, un informe multinacional que parecía darle a Libia —y, subsecuentemente, al gobierno de la Jamahiriya— la alabanza y las marcas más altas, en fecha tan temprana como enero de 2011, en torno a una amplia gama de temas”. “Lo que el Hermano Gaddafi hizo en cuanto tomó el poder, después de un incruento golpe de Estado, fue nacionalizar el petróleo, echar a Gran Bretaña y Estados Unidos fuera de sus bases libias y utilizar el petróleo para financiar movimientos revolucionarios en contra de regímenes títeres en África y otras partes del mundo. Esto lo convirtió en persona non grata en Occidente y lo estableció, asimismo, como enemigo de aquellos que tradicionalmente han hecho mal uso de África y envenenado el liderazgo africano”. “Cuando hablo de envenenar no me refiero a veneno físico, sino a que los líderes africanos que se querían más a sí mismos que a la liberación de nuestra gente son el tipo de líderes que los Estados Unidos apoyaron. No apoyaron a Osageyfo Kwame Nkrumah, Sekou Ture o a alguno de los muchos líderes negros de pensamiento revolucionario, Patrice Lumumba u otros. Estos fueron los líderes negros asesinados o abandonados, o puestos en la mira para destruir su poder porque comprendieron la importancia de tener un África unida. No un montón de estados separados”. “Kwame Nkrumah, Gamal Abdel Nasser, ellos intentaron volver realidad la idea del Honorable Marcus Garvey: que debe existir una sola África. Es lo que quería Nasser, es lo que quería Nkrumah, es por lo que Gaddafi gastó miles de millones de dólares, lo que trató de promover: una Unión Africana como paso previo a la conformación de unos Estados Unidos de África. Esto es lo que lo convirtió en una amenaza para Occidente; y, desafortunadamente para ellos, él todavía está allí, todavía está vivo. A la larga, tendrán que aprender a convivir con ese hombre”. “Si pudiera establecer un punto, Gaddafi elevó el nivel de vida del pueblo libio al sitio más alto en el continente africano y hasta en el Oriente Medio. Liberó a las mujeres musulmanas y las invitó a formar parte de su gobierno, a formar parte de una sociedad donde no tuvieran que sentarse atrás ni tolerar que los hombres hicieran cualquier cosa”. “Las mujeres son socias de los hombres en Libia. Gaddafi le dio una orientación socialista a su gobierno en los primeros días; pero, conforme fue involucrándose más profundamente con el Corán, se fue viendo más a sí mismo como un reformador del Islam, y estaba enmedio de un proceso de reforma del Islam en su país, y generando la influencia necesaria para que este proceso pudiera desarrollarse también en otros lugares”.

“Yo estaba allí con él cuando invirtió 33 mil millones de dólares en crear una maravilla del siglo XX donde se descubrió agua bajo el desierto. Y utilizó esos 33 mil millones de dólares para extraer agua del desierto, y yo estaba con él el día que oprimimos no sé qué botón y el agua comenzó a fluir desde las cercanías de Benghazi hasta Trípoli, casi en la frontera tunecina”. “Él hizo de la agricultura un deber absoluto, al punto que Libia produce lo que se come. Les hizo posible a los campesinos conseguir tierras, y equipos para trabajar las tierras, de modo que Libia nunca tenga que depender de otros para satisfacer sus necesidades básicas de alimentación. Esto es lo que este hombre estaba haciendo, y no sólo por Libia: lo hacía también por África. Se convirtió en una espina clavada en el costado de Europa, y a eso se debe que Europa exija un cambio de régimen”. “El hombre no da órdenes desde una oficina del poder: es un líder revolucionario. Nosotros le llamamos Hermano Líder Muammar Gaddafi. Él fundó una democracia participativa donde la gente toma las decisiones de su futuro, y él conduce la revolución”. “Yo estaba al lado de él cuando los presidentes africanos entraron por la puerta y les dio ánimos diciendo: “Miren, somos revolucionarios; no podemos tener una revolución cada cuatro años, o cada ocho, poniendo en el gobierno a alguien que tal vez continúe o tal vez no la construcción de la obra que hemos comenzado”. Así que cuando la gente dice que él ha permanecido en el poder demasiado tiempo, se requiere de un gran esfuerzo para liberar la mente de un estado colonial y esclavista. Gaddafi no se interesa en el poder por el poder mismo, sino que quiere darles poder a las personas”.

“Todos en Libia tienen un lugar para vivir. Y él ha becado a cientos de miles de jóvenes para que estudien en otros países, y el gobierno libio paga por su educación. Si un libio necesita una operación médica y tiene que ir a Europa o América a operarse, el gobierno de Libia paga por ello. No existe ningún otro gobierno en la tierra que haga lo mismo por su pueblo en la medida que este hombre lo ha hecho”.

“Ese tipo de líder, con ese tipo de trabajo por su pueblo, es un enemigo para los que quieren vivir del sudor, la sangre y el cansancio de los pobres, pero que no le dan nada a los pobres a cambio. Esta es la razón por la cual dicen algunos que, si este hombre llegara al poder en Estados Unidos e hiciera aquí lo que ha hecho en Libia y trató de hacer en África, tal vez los estadunidenses renunciarían a la 22a enmienda y la reformarían para hacer de Gaddafi presidente de Estados Unidos de por vida”

. Como el lector puede ver, no estamos apoyando a la falsa organización de derechos humanos llamada Amnistía Internacional: estamos apoyando al verdadero Héroe de los Derechos Humanos llamado Muammar Gaddafi (http://www.youtube.com/watch?v=aJURNC0e6Ek) y a las normas de respeto a los derechos humanos vigentes durante la Jamahiriya (http://www.mathaba.net/gci/igc.htm). Invitamos al lector a ir a la página www.amnestyusa.org/heroes y votar por Muammar Gaddafi como Héroe de los Derechos Humanos. Por favor, hay que escribir el nombre exactamente así: “Muammar Gaddafi”, ya que es así como activistas reales de derechos humanos lo han enviado a concurso, y una ortografía distinta impedirá que el nuevo voto se añada a los ya existentes. Por último, les pedimos a los lectores su apoyo para que tanto Amnistía Internacional como otras falsas organizaciones de derechos humanos sean obligadas a rendir cuentas por cometer crímenes contra la humanidad, junto con la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y los funcionarios de esas entidades. Los invitamos a donar hoy (http://mathaba.net/donate.htm) y a apoyar las iniciativas www.worldcrimes.org y www.peoplesconference.org/cah. Muammar Gaddafi transformó Libia, que pasó de ser el país más pobre del mundo a convertirse en el más próspero de África; más próspero aún que Brasil, Rusia y Arabia Saudita.