Mi nombre es DAniel y estuve en libya hará cinco meses. Estuve viajando por varias ciudades del país (ghadames, Apolonia, Sabratha, Benghazi, Tripoli, etc) y en todas me atendieron muy bien, con más seguridad que en la propia barcelona, donde vivo. Gente pacífica y amable. Los hechos me han dejado asombrado en el pais africano con mejor calidad de vida. http://es.wikipedia.org/wiki/Anexo:Países_por_índice_de_desarrollo_humano
Me asombra y me duele a la vez. Creo que el mayor problema es que la gente no conoce Libya, y es muy vulnerable a palabras como dictador, masacre, etc. y juzga sin conocer. Creo que se ha creado una realidad ficticia, una gran mentira. Creo que lo de Tunez y Egipto podria haber estado planeado tb con el ánimo de confundir con el tema de libya, pero eso es una suposición no contrastada.
A continuación un link con un video que habla de una posible conspiración en el atentado de Lockerbie y en el que figura una futura misión de la CIA: Provocar revueltas y confusión en el Oriente Medio...
Hay que ir con cuidado porque según como cuentas las cosas parece que estes apoyando a un dictador. Hay que insistir en que la onu no está frenando a gadafi o protegiendo a la población, está apoyando a un grupo armado rebelde que no se sabe ni quienes son, ni cuantos son, ni qué ideologias tienen. (aunque igual ellos si que saben quienes son)
Mas sobre Libia, esta es una informacion que escribio alguien el 13 de marzo 2011:
En este país africano no hay hambruna, el 80 por ciento de la población está alfabetizado y tiene acceso al agua potable y la sanidad. La esperanza de vida es de 79 años y la tasa global de fecundidad es del 2.7, un signo claro del avance de la mujer.
Lo inverosimil de la crisis de Libia, en la actual coyuntura de la región, es que los sublevados no son los ciudadanos, hartos de la dictadura férrea de Gadafi, sino jefes tribales –pseudo caudillos-, que respaldados por los comandos de la OTAN (cuya sensibilidad “humanitaria” se desactiva cuando Israel bombardea a los palestinos o Turquía a los kurdos) están empujando al país hacia una guerra civil. Declararlo como «estado paria» y convertirlo en un protectorado, encajaría a la perfección en la nueva estrategia de la OTAN, marcada por la lucha de las potencias para hacerse con el control de los escasos recursos energéticos que quedan. Libia es la principal reserva de petroleo de África, cuyo coste de producción del crudo, de gran calidad, no llega al dólar por barril, comparándo con el de Canadá, por ejemplo, que alcanza los 50 dólares. Toda una tentación para las petroleras estadounidenses, marginadas en el mercado libio que está dominado por Europa, China y Rusia.
El plan contra este país es sospechosamente parecido al de Irak, otro Estado árabe desarrollado, al que destruyeron para apoderarse de su Oro Negro. El cenit petrolero acelera los acontecimientos. EEUU, ante la inestabilidad de Oriente Medio –principal caudal del crudo del mundo-, y la imposibilidad de adueñarse del hidrocarburo de Asia Central (zona de influencia de China y Rusia), pone su mirada en África. Allí, los chinos, adelantándose, ya cuentan con varios millones de efectivos que no sólo intentan controlar sus recursos energéticos, sino también sus mercados. Mientras la posición geoenergética de Libia seduce a Washington, Pekín abandona su política “no militarista” y anuncia su rearme, enseñando los dientes.
Estamos ante una nueva recomposición de las zonas de influencia, en la que Gadafi no es más que una miserable pieza de una pérfida maniobra de EEUU.
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