
Las instituciones estatales, las organizaciones políticas, de masas y sociales, dirigidas por la vanguardia política, se prepararon para participar en el cumplimiento del compromiso contraído ante nuestro pueblo y el mundo.
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La Revolución movilizó cientos de miles de alfabetizadores, que permanecieron en sus puestos entre el mes de abril y diciembre del 1961. .
En la medida que se iba alcanzando el triunfo, la hermosa tarea se cerraba con actos de masas al nivel de los barrios y municipios, en los que se izaba la Bandera de “Territorio Libre de Analfabetismo”. .

Fueron verdaderas fiestas de pueblo, con aclamaciones, vítores a Fidel y a la Revolución, palabras emocionadas de reconocimiento a los alfabetizadotes y a la conciencia mostrada por el pueblo, en particular por los alfabetizados, consignas, cantos y discursos, que proclamaban la alegría de todos..
Finalmente, el Comandante en Jefe convocó a la celebración al nivel nacional. Decenas de miles de brigadistas, desde todos los rincones del país, viajaron hacia La Habana para reunirnos con Fidel y festejar por la victoria. .
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